Laura Ardila lleva 19 años haciendo periodismo de investigación en la región Caribe del país. La crónica y las historias sobre el poder se han convertido en el tema principal de sus investigaciones que, en varias oportunidades, la han hecho merecedora de premios de periodismo, entre los que está el galardón de Periodista del Año del Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar (2017).
Laura es una investigadora experta en el cubrimiento de los poderosos en Colombia, por eso, y a propósito de su participación en el EpiCdR, nos compartió algunas reflexiones sobre los desafíos a la hora de cubrir los poderes locales, las similitudes de las prácticas de los corruptos en varios países de América Latina y los obstáculos que ponen los poderosos para evitar que los desenmascaren.
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¿Cuáles son las críticas que le hace a los que ejercen los poderes locales, desde su experiencia como periodista?
Laura Ardila: No enfocaría esto como una crítica, sino más bien como el desafío que imponen los poderosos, no solo los locales, sino también los poderosos en general, especialmente en relación con el acceso a la información.
Los poderosos, casi siempre, buscan controlar el mensaje que se difunde sobre ellos, lo que representa un gran obstáculo para acceder a la información. En muchas ocasiones, no es fácil obtenerla, ya que no cumplen con su obligación de responder a herramientas constitucionales básicas para el periodismo, como el derecho de petición.
Esta actitud se convierte en una barrera que a menudo obstaculiza el trabajo de los periodistas. Por lo tanto, considero que uno de los principales desafíos, tanto para los poderes locales como para los poderes en general, es el limitado acceso a la información que le permiten al periodismo, para ejercer su oficio.
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¿Cuáles son los desafíos que enfrenta el periodismo en Latinoamérica al investigar los poderes locales?
La: Estamos frente a una situación común, ya que seguimos enfrentando los mismos desafíos y retos al ejercer el periodismo en nuestros países. En Colombia, específicamente en las regiones periféricas, las condiciones precarias persisten. La lista de medios con bajos salarios y malas condiciones laborales, que van más allá del sueldo e incluyen tipos de contrato insatisfactorios, sigue siendo larga. Además, la falta de oportunidades laborales es evidente, especialmente en las regiones.
Por otro lado, el desafío de la seguridad en el ejercicio del periodismo aún persiste. Aunque las condiciones han cambiado en Colombia en los últimos años, los poderosos ahora utilizan estrategias diferentes. Más que silenciar físicamente al periodista, buscan desacreditarlo. La violencia digital, que es igual de dura y fuerte, sigue siendo una realidad. Desafortunadamente, seguimos siendo testigos de desapariciones y ataques a la integridad física de los periodistas.
Este año, en Colombia, hemos presenciado la tragedia del asesinato de un periodista en el pueblo de San Pedro, Sucre. Aunque las autoridades aún no han revelado oficialmente las motivaciones detrás de este asesinato, el impacto es innegable. Además de la pérdida del periodista, la comunidad de San Pedro se ha sumido en el silencio. Mardonio Mejía, el periodista asesinado, deja un legado doloroso que nos recuerda los desafíos persistentes que enfrentamos en el ejercicio del periodismo.
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En resumen, en este momento nos confrontamos a los mismos desafíos que amenazan siempre el ejercicio del periodismo. La precariedad laboral y la falta de seguridad siguen siendo preocupaciones fundamentales en nuestro país.
¿Puede darle un consejo a las y los periodistas que están haciendo investigaciones sobre el poder?
LA: Les recomendaría, especialmente a aquellos que trabajan en medios regionales o periféricos que no cuentan con grandes respaldos, que consideren la opción de practicar el periodismo colaborativo. Lamentablemente, no existe una receta que nos proteja completamente de los abusos de poder, pero creo firmemente que una de las mejores defensas para los periodistas es la capacidad de establecer redes de colaboración. Un periodista individual está mucho más expuesto que aquel que forma parte de una red colaborativa, ya que resulta más difícil para el poder atacar o silenciar a toda una red. Por lo tanto, buscar aliados que nos ayuden a descubrir historias, identificar problemas y difundir nuestras investigaciones sobre el poder siempre será una excelente estrategia.
Además, es relevante recordar el interés de dominar la artesanía del oficio periodístico. Antes de comenzar a investigar un tema, es fundamental asegurarse de tener un conocimiento exhaustivo, o al menos amplio, sobre todo lo que se ha publicado previamente al respecto.
Nunca debemos descuidar el aspecto del reportaje, ni dejar que nuestros prejuicios influyan en nuestro trabajo. El compromiso con la honestidad hacia nuestras audiencias y lectores es esencial. También es crucial cuidar y dominar nuestro lenguaje, ya que es la herramienta principal que tenemos para contar las historias de manera efectiva.
Del 15 al 16 de marzo de 2024 realizaremos, en la Pontificia Universidad Javeriana, nuestro Encuentro de Periodismo de Investigación, EpiCdR, en su edición número XVI. Este evento, consolidado como un referente en el ámbito periodístico colombiano, convocará a periodistas, académicos y estudiantes para explorar el papel esencial del periodismo de investigación en la forja de una sociedad más equitativa y bien informada.
Conozca los otros expositores que harán parte de nuestro XVI EpiCdR