La contratación en la Contraloría de Manizales viene en alza en comparación con los dos primeros años del pasado contralor Lindon Alberto Chavarriaga, actual secretario de Cultura de Caldas. El excontralor, en su primer año (2012) contrató $173 millones 554 mil (más $3 millones 600 mil en adiciones). Ana Cristina Jaramillo Gutiérrez, en su primer año de contralora (2016), lo hizo por $332 millones 973 mil (más $38 millones 830 mil en adiciones), en su mayoría por contratación directa en contratos por prestación de servicios.
En el 2013, Chavarriaga aumentó la contratación hasta los $209 millones 358 mil ($7 millones 200 mil en adiciones), mientras que Jaramillo Gutiérrez, a julio 6 del 2017, contrató por $336 millones 154 mil, un 60% más. Los datos son de la propia Contraloría Municipal entregados en respuesta a un derecho de petición.
La contralora argumentó que debió contratar más personal calificado para atender las necesidades fiscalizadoras de la entidad, lo cual se concluyó tras un análisis de la planta de personal, de los requerimientos misionales y administrativos.
Presupuesto
Mientras que el presupuesto para el 2016 en la entidad era de $2 mil 453 millones 366 mil, para el 2017 pasó a ser de $2 mil 698 millones 703 mil, un alza del 10%.
Llama la atención en la actual Contraloría que algunos contratistas de Jaramillo Gutiérrez durante su periodo como alcaldesa de Supía ahora lo son de la Contraloría, como los casos de Alba Lucía Forero, Ana Victoria Peña, Juan Pablo Salazar Gómez y Juan Roberto Jiménez, quien fue candidato para el cargo de contralor.
«Que quede claro que yo aquí no le estoy pagando favores a nadie. Las personas encuentran las ofertas en las páginas institucionales, además de ser personas con las que nos fue bien trabajando, también están vigentes las amistades», indicó.
Recuento
La designación de Ana Cristina Jaramillo como contralora de Manizales estuvo llena de polémica desde su inicio.
Los señalamientos comenzaron desde que los candidatos para el cargo presentaron sus hojas de vida y empezaron las evaluaciones, de las que se encargaron, entre el 28 y 29 de diciembre del 2015, el subsecretario del Concejo de Manizales, Sebastián Giraldo (ahora subcontralor de Manizales), y Alejandro Franco, en ese entonces asesor de la corporación y en la actualidad secretario Jurídico de la Gobernación de Caldas y hermano de la candidata a la Cámara de Representantes por Cambio Radical Adriana Franco.
En la primera acta preliminar del informe de calificación de postulados, que solo firmó Franco, pues Giraldo no estuvo de acuerdo, aparece Ana Cristina Jaramillo, con un puntaje de 220, inferior al de las otras dos personas que conformaron la terna final que se les presentó a los actuales concejales: María Norelly Restrepo (243) y Juan Roberto Jiménez (242), incluso otros aspirantes al cargo aparecían con puntaje superior a Jaramillo.
Para la segunda evaluación, de la que se encargó la Mesa Directiva del anterior Concejo, se presentaron unos resultados diferentes. María Norelly Restrepo (243) y Juan Roberto Jiménez (242), los mismos puntajes de la primera evaluación, pero Ana Cristina Jaramillo tenía 242 puntos, es decir 20 más que antes. En aquella ocasión fue la única aspirante que subió su calificación.
En los círculos políticos, desde antes de la elección, se hablaba de Jaramillo como la nueva contralora de Manizales. Finalmente, la liberal fue elegida con 13 votos, contra 5 de Jiménez y un concejal que no votó (vea lo que respondieron en aquel entonces el expresidente de la Corporación y el subsecretario).
La decisión la criticó Asdeccol (Asociación de Servidores Públicos de los Órganos de Control de Colombia) seccional Caldas y el día posterior a la elección, Alba Lucía González, que aspiró al cargo junto con otras 34 personas, demandó al Concejo por la decisión. González exigió que se declarara nulo el proceso y se hiciera otro en el que se realizara una prueba de conocimiento a los aspirantes, tutela que negó el Juzgado Segundo Municipal para Adolescentes.
Un año y 10 meses después de haber sido nombrada, la contralora respondió que ella presentó su hoja de vida y fue el Concejo el encargado de nombrarla. Respecto al alza en el puntaje de esa primera evaluación, aseguró que la Corporación era la que debía responder.
¿Quién es?
Ana Cristina Jaramillo, nació en Riosucio, siempre ha representado los ideales liberales. En el 2011 fue electa alcaldesa de Supía con 3 mil 345 votos, periodo que terminó en diciembre del 2015, es decir pasó de la Alcaldía a la Contraloría. Su pasado está ligado a Ferney Tapasco, hoy condenado por el asesinato del subdirector del periódico La Patria, Orlando Sierra. En la década del 90 ella ejercía como subcontralora de Caldas y Tapasco como diputado.
“…en la oficina de la subcontralora Cristina Jaramillo, despachaba Ferney Tapasco, apropiándose de un despacho oficial, quien era un particular”, escribía Orlando Sierra el 1 de octubre del 2000, en su columna Punto de Encuentro. Para la época, Ferney Tapasco ya no ejercía como diputado, pues su elección había sido anulada.
Frente a su relación con Tapasco, quien también es de Supía, la contralora dijo, en entrevista para esta investigación, que le tiene aprecio y consideración, incluso una amistad, pero ambos cuentan con una trayectoria política diferente.
Precisamente es la herencia de Ferney Tapasco en el Partido Liberal, la que dirige hoy la ciudad. Mario Castaño, actual representante a la Cámara y líder del liberalismo caldense; el alcalde de Manizales, Octavio Cardona; Juan Carlos Gómez, secretario de Educación; Jhon Hebert Zamora, secretario de Gobierno; Jhon Robert Osorio, secretario General; Carlos Alberto Gaviria, secretario de Tránsito, y Héctor William Restrepo, secretario de Salud, comenzaron su carrera política con el hoy condenado.
A esto se suma que César Alberto Gutiérrez, secretario de Obras Públicas de Manizales, fue contratista de la Alcaldía de Supía, en el mandato de la hoy contralora. En el Secop aparecen tres contratos de: $12 millones, de $15 millones y de $18 millones 540 mil.
Jaramillo asegura que tiene una amistad con Octavio Cardona, pero esa es la razón por la cual los dos hacen las cosas bien. «Ni él me tapa ni yo le tapo», dijo Jaramillo.
El nombre de Ana Cristina Jaramillo ha llegado a sonar para la Gobernación de Caldas. Su hermana es Carmenza Jaramillo Gutiérrez, actual embajadora de Colombia en Portugal, y su sobrina es Juana Carolina Londoño, exrepresentante a la Cámara y actual presidenta de Fiducoldex, quien no pudo repetir curul en la actual legislatura porque su tía era alcaldesa del municipio caldense.
«Nací en una familia para la cual el ejercicio de la política es una actividad muy bonita. Mi padre fue conservador y mi madre liberal, ambos fueron alcaldes. Acompañamos muchos años al senador Renán Barco, a quien, además de mis amigos liberales, le debo la posición donde estoy», concluyó.
¿Quién la rodea?
Jaramillo Gutiérrez tiene como subcontralor a Sebastián Giraldo, quien se desempeñaba como subsecretario del Concejo. Gildardo Arlén Cano, director de Planeación y Control Fiscal de la Contraloría, trabaja con Jaramillo desde los años 90, cuando se cruzaron en la Contraloría de Caldas, posteriormente laboró en la Alcaldía de Supía, en la administración de Jaramillo como secretario de Hacienda y Patrimonio Económico e incluso fue alcalde encargado.
Al preguntarle a la contralora por qué se dio el cambio de Sebastián Giraldo del Concejo a la subcontraloría, sostuvo que lo conoce hace mucho tiempo al igual que sus capacidades. «No creo que el seguimiento que el Concejo le hizo a mi hoja de vida dependiera solamente de Sebastián, Una vez me posesioné, él presentó la hoja de vida para el puesto, el cual es de libre nombramiento», agregó.
Respecto a si hay un conflicto de intereses o no, Giraldo explicó que: «Nunca fui concejal. Fue la Mesa Directiva del anterior Concejo de Manizales la encargada de evaluar las hojas de vida, dar la calificación y presentar la terna a los actuales concejales». Agregó Giraldo que no existe ninguna inhabilidad para que él ocupe la subcontraloría, además, recordó que el anterior subcontralor también se había desempeñado en el Concejo
Balance de su gestión
Ana Cristina Jaramillo y el subcontralor Giraldo realizaron un balance de su periodo al frente de la entidad. «Ha sido un tiempo en el que se han mostrado resultados. En lo que va del 2017 podemos decir que han sido reportados 17 hallazgos administrativos, con un monto fiscal por $15 mil 362 millones. Por responsabilidad fiscal se han abierto 27 procesos, de los cuales se puede hablar de una cuantía de $75 mil millones», informó la contralora.