«En muchas ciudades colombianas la partería tradicional es un saber ancestral que se ha ido perdiendo: los partos en hospitales occidentales y las cesáreas programadas han hecho que parir en la casa sea visto como una práctica arcaica y peligrosa, y que la cesárea, en vez de ser excepcional, sea una práctica generalizada. (…) Pero los Misak de Silvia siguen naciendo como lo han hecho durante siglos y para preservar esta tradición la IPS-I Mama Dominga y un grupo de parteras tradicionales de su comunidad, unió esfuerzos y conocimientos para propender por el bienestar, la salud y el derecho de cada mujer a elegir en qué lugar quiere tener el parto. Un trabajo que ya arroja resultados positivos». (Fragmento de la investigación)
Jonwhi Hurtado, uno de los 20 periodistas participantes del ciclo de capacitación del CdR/Lab: Con Enfoque de Género, viajó hasta esta comunidad indígena del Cauca para conocer documentar la historia de una comunidad en la que la medicina tradicional y los saberes ancestrales se unen para brindar a las mujeres una alternativa natural y segura al momento de parir sus hijos.
«En el mundo fallecen cada día más de 800 mujeres a causa del embarazo. En Colombia en el año 2014 la mortalidad materna fue de 51 por cada 100.000 nacidos vivos. A esto se le suma que el número de partos programados por cesárea en Colombia se ha disparado: a pesar de que la Organización Mundial de la Salud, OMS, recomienda que solo el 15% de los partos sea realizados a través de esa práctica, en el país, la cifra ya supera el 46%». (Fragmento de la investigación)
Por esta problemática, la partería tradicional surge como una opción para sanar a las mujeres; y la medicina basada en saberes ancestrales, como una opción alternativa a la medicina tradicional, a veces invasiva, y superficial. Sin embargo, los dos saberes están comenzando a complementarse.
«Las parteras vienen trabajando con el hospital a través de un programa que busca el beneficio de las maternas y de los neonatos: el primer sábado de cada mes se reúnen con personal del hospital para hacer pedagogía frente al tema de partos y asuntos de primera infancia; de esta manera, cuando un parto es de alto riesgo, son las mismas parteras las que avisan al hospital, reduciendo así las probabilidades de muertes perinatales y maternas.
En el plan de vida de los Misak se contemplan unos subprogramas de salud, entre ellos el recuperar sus saberes ancestrales, de allí la idea de estimular el parto a través de su cosmogonía.
En Mama Dominga no se practican cesáreas, ya que es un hospital de primer nivel. Por su lado las parteras tradicionales, cuando atienden los partos en sus casas, ven en el calor, el cuerpo caliente y las bebidas calientes, los puntos inamovibles para que puedan hacer su trabajo; no lo hacen por dinero, lo hacen por convicción». (Fragmento de la investigación)
Así, el trabajo en conjunto que se viene realizando ha tenido resultados positivos en la comunidad, ya que las muertes prenatales y maternas se han reducido; los derechos sexuales se fomentan y se previene la violencia de género.
«En el hospital a mí me dio duro ya que es en salas preparadas de occidente. Uno tiene que hacer lo que los doctores digan. A mí me brindaron comidas frías, ahí en Popayán no había qué consumir, entonces me tocó consumir más que todo arroz, pero aguantar tampoco podía, porque estuve tres días hospitalizada. Pero igual en la casa me hicieron todo con las plantas calientes, me sacaron ese frío que había absorbido. Gracias a mi madre y a las abuelas que supieron hacer todo ese ritual». (Fragmento de la investigación)
«En Silvia las mujeres no temen embarazarse, ya que la procreación es un acto estimulado desde el cabildo, es un articulador de su cosmovisión, en otras palabras, sienten que la vida es una alegría, no una epidemia. Y el parto, o mejor, el momento en el que los niños Misak llegan al mundo, es el comienzo de esa alegría». (Fragmento de la investigación)
Esta historia es parte de la iniciativa de entrenamiento y producción realizada por el CdR/Lab, en asocio con la Organización Internacional para las Migraciones y la cooperación de Suecia, que concluyó con la producción de 12 historias, que visualizan un esfuerzo por incluir el el enfoque de género en los medios colombianos. «Estos trabajos periodísticos muestran que es posible contar historias que representan a hombres y mujeres sin estereotipos con un lenguaje transformador para dejar atrás prejuicios que pueden generar discriminación e inequidad. Esta es una invitación para leer contenidos de alta calidad periodística, perfilados desde ángulos novedosos y con una perspectiva de género en la sociedad». (Segmento de presentación de las historias)
Jonwhi Hurtado, autor de la investigación, periodista del medio de periodismo de investigación ‘Tras la Cola de la Rata’, habla sobre su investigación, la importancia de incluir el enfoque de género en las agendas de los medios colombianos, y el acercamiento a fuentes con tradiciones y culturas ancestrales.
¿Cuáles fueron los retos al realizar este reportaje?
El reto principal es que al entrar a una comunidad indígena si no llevas un trabajo previo con ellos, una confianza construida por hechos, no te van a decir nada. Antes de preguntar hay que convivir con ellos, como dice Leila Guerriero, hacerse invisible para ellos.
Las comunidades indígenas suelen ser muy cuidadosas con el tema de los medios, de dejar entrar a alguien extraño. ¿Cómo consiguió acercarse a los Misak, especialmente a las mujeres parteras?, ¿cómo logra ese acercamiento a fuentes de este tipo?
El yo poder llegar a ellos, se da gracias a que desde hace unos tres años he ido más de cinco veces. Nunca había escrito sobre las parteras, pero ya las conocía, y ya me conocían. La misma gobernadora Misak, Mamá Liliana, dice: «Los mayores nos dicen que cada que llegue alguien, no le contemos todo lo nuestro de una, que se lo ganen», bueno, y eso también es un reto, porque lo máximo que uno hace es aproximarse, el mundo Misak es un río que entiendes a gotas mientras pasa el tiempo.
¿Por qué es importante empezar a trabajar el enfoque de género en las agendas de los medios colombianos? ¿Qué recomendaciones daría a periodistas que quieren comenzar a incluir enfoque de género en sus historias?
Es importante porque de entrada tendríamos que llegar al momento en que no nos hagamos esa pregunta y se sobreentienda. Pero, mientras eso pasa, es importante porque los periodistas estamos llamados a escribir de la realidad de nuestro entorno, de lo bueno y lo malo, de ponerle al lector en sus manos y ojos qué está pasando a su alrededor y está ignorando. Es la única forma de luchar con los medios que han desviado la naturaleza del periodismo. Esos que distan de mostrar y se acercan al deseo de manipular.
Que se lo crean. Que sientan que el «enfoque de género» no puede verse como una gran pauta para mostrarnos incluyentes. Que abran la mente a otras historias, que recuerden que no solo existe el blanco y el negro, que también hay matices. Y que el buen periodista es el que lleva la mirada al lugar diferente donde los demás la tienen.
¿Cómo fue la experiencia del taller de CdR/Lab, y el trabajo en conjunto con una editora de otro medio?
CdR/Lab fue uno de esos momentos que te enseñan en dos, tres días, lo que te puede llevar meses. Conocí personas para la vida. Y trabajar con una editora, en mi caso Adriana Villegas, es extender las redes. Además es necesario que otra persona vea con otros ojos tu trabajo. Un texto es un hijo y difícilmente tú le encuentras los errores a tus hijos. Sólo alguien que esté en otra orilla te lo puede decir y eso hizo Adriana, estar en la otra orilla y decirme qué camino tomar.
Mira aquí el reportaje completo.
Conoce cómo se vivieron los encuentros de capacitación de este CdR/Lab Con Enfoque de Género:
- María Emma Wills, Nancy Prada y ONU Mujeres en primer día de Cdr/Lab Con Enfoque de Género.
- Sandra Sánchez y Fabiola Calvo en el segundo día de capacitación CdR/Lab Con Enfoque de Género.
- Así fue el primer día del segundo encuentro de CdR/Lab: Con Enfoque de Género.
- Así fue el segundo día del segundo encuentro de CdR/Lab: Con Enfoque de Género.